«Porque yo voy de frente, soy de los que dicen las cosas a la cara«.
Dices.
Y lo dices siempre con orgullo.
Por sincero. Por honesto. Por no rehuir el conflicto y responder al agravio.
Habrá virtud en ello.
Pero lo honrado, ya puestos, ¿no sería llevarlo aún más lejos? Hasta las últimas consecuencias.
Ir de frente y decir todo a la cara. Cueste lo que cueste.