Cuando Zerokotan me invitó a participar en la cuarta entrega de sus «bilDumA zeRo» reconozco que me lo tuve que pensar un poco. Me sentía estimado, agradecido. No quería fallarles.
Contaba con algunos poemas y no sabía cuántos borradores.
Un concepto inequívoco pero muchas limitaciones.
Bajo de forma, voluntarioso, consciente.
No engañé a nadie. Ni siquiera a mí mismo, ofreciendo un plan B, por si no alcanzara al A.
Porque, en realidad, era la excusa precisa para lanzarme a este río.
En casa lo entendieron bien. Además, me regalaron todas las horas de la noche. Y, por si fuera poco, libertad para construir los espacios a imagen misma de nuestra intimidad. El propio texto lo evidencia, así que no ahondaré en la valentía que hay en ello. Pero es honesto darle su valor. A ningún lector atento puede escapársele cuánto hay de ella aquí, a escala de vida.
Finalmente entregué esta Germinación y este Vínculo (toca en la portada para obtener el .pdf)
Para facilitar la lectura y todo eso de la compartición, he decidido incluir un enlace a cada poema. Serían estos:
- Germinación
- Vínculo
- Bisturíes
- Aceleración del tiempo
- Trabajos y renuncias
- Suerte
- Canción de espejos
- Eslabón abierto
Luego llegó el momento de presentar la bilDuMa, junto a mis compañeros de viaje. Un trámite que nunca elegiría, pero que acabo siempre disfrutando. Esta vez con más razón, porque compartido es mejor.
Hay video del evento, pero los malos me obligan a mandaros a su página.
El lento ahora 